Médico legista confirma buen estado de conciencia de la señora Lidia Villiger al momento de hacer su testamento
El facultativo, que ha realizado más de 300 exámenes de este tipo y concurrido a juicios orales en todo el país. Ante la mirada atónita del abogado querellante, fundamentó una y otra vez que el día 7 de febrero de 2018, entre las 10 y las 10 y media, ella se encontraba en condiciones para aprobar su testamento y que su estado de salud sólo se complicó a partir de las 11:30 de la mañana de ese día del verano de 2018; según se ve reflejado en cada documento de la Clínica Alemana.
El médico legista Darío Benavente, concurrió el jueves pasado como perito a testificar en el juicio oral por el testamento de Traiguén. En la audiencia, el experto explicó cómo la señora Lidia Villiger Klein llegó a la Clínica Alemana de Temuco derivada desde el Hospital de Traiguén y que si bien tenía varias condiciones de salud preexistentes, ninguna le afectaban su estado de conciencia, sino por el contrario, que al llegar al centro asistencial se presentaba vigil, cooperadora y con una puntuación máxima (15) en la escala de conciencia de Glascow.
Benavente explicó además que la señora Lidia venía con una infección en su mano derecha, entre el dedo pulgar e índice, lo que se venía tratando por su médico con antibióticos desde hacía algunos días. Esta condición, explicó el médico, le impedía el movimiento de su mano, dedos pulgar e índice y le significaban mucho dolor al usarlos, junto con un aumento de volumen de su mano.
Evolución dentro de la clínica
Luego, explicó el médico legista, su condición se complicó a contar de las 11 de la mañana del día 7, con una «bradicardia extrema» e hipotensión, es decir, los latidos de su corazón disminuyeron a menos de 50 por minuto y le bajó la presión. Ante esto y a petición de sus familiares, a las 11:30 horas se pidió su traslado a la UCI de la Clínica Alemana, donde fue evaluada con un Glascow 11, recuperándose durante el día para volver a niveles normales de conciencia.
«Entonces, le pregunta el abogado querellante, ¿usted podría decir que antes de las 11 la señora Lidia venía deteriorándose?», «No, precisamente lo contrario«, le respondió Benavente, quien le explicó -con peras y manzanas- que ella antes de las 11 de la mañana se encontraba bien y conciente, ya que de lo contrario, algo se habría consignado en su ficha médica., lo que no fue así.